Articulo de Opinión: Los Otros GOTYs

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Pues otro añito que termina y esta ocasión podemos decir que ha sido un buen año para los jugones. 2017 se va dejándonos una cantidad ingente de buenos juegos en las estanterías de las tiendas y que seguro que a más de uno nos ha faltado tiempo y dinero para poder jugar a todo lo que nos hubiera gustado jugar. Como cada año también hemos tenido la gala de, para unos infames y para otros celebres, Game Awards que ha generado una verdadera tormenta, por no decir guerra, de opiniones que ha incendiado las redes sociales. Ahora con el souffle del GOTY ya frío y con los ánimos mucho mas calmados en NoesPaisparaFriks nos disponemos a hacer un homenaje a esos juegos que sin salir en ninguna gala y sin llevarse ningún premio si que han sabido ganarse un hueco en nuestros corazones de gamers.  Así que todos los miembros de la web y algún que otro conocido colaborador se han puesto manos a la obra y nos traen dos juegos que, pasando muy de puntillas por el panorama videojueguil este año, no deberías dejar de jugar. Así que sin mas dilación aquí van nuestros “OTROS GOTYS” (nombre con patente en curso).

 

Siempre me he considerado un tipo de jugador más llamado por los juegos cercanos al triple A que por los indies que presentan otro tipo de experiencias jugables para suplir sus carencias técnicas. Pero en los últimos años los juegos independientes despiertan en mi tanto o más interés como los más comerciales, y es por ello que mis grandes ausentes son dos de los títulos que más he disfrutado este año y que llevan la etiqueta de indies por bandera. Hablo de Rime y de Little Nightmares, dos juegos distintos entre sí pero que comparten similitudes como el buen hacer en lo artístico y el trasladar al jugador directamente al mundo que exponen. Dos auténticas obras de arte, una española y otra sueca, con estilo propio.

 

 

Como cada año los GOTY dejan a su paso un rastro de cadáveres en forma de grandísimos videojuegos que no han sido nominados a ninguna categoría. En este caso yo os traigo dos de los títulos que más he disfrutado en los últimos años, y además dos juegos muy diferentes entre sí.

En primer lugar y como no podía ser de otra manera, había que mencionar a la última obra maestra de Fumito Ueda y su Team ICO. Sí amigos, hablo de The Last Guardian, un videojuego muy especial que ha supuesto una promesa cumplido y un sueño realizado. Una obra de arte que ya tiene un hueco en mi corazón y que siempre recordaré como una experiencia única, y como me dijo un amigo, “algo que me pasó”.

En segundo lugar y cambiando totalmente de tónica, quisiera acordarme de Ghost Recon Wildlands. Ubisoft se marcó un tanto y de los gordos aprovechando el tirón “Narcos”, y acabó haciendo este grandísimo sandbox aprovechando la veterana franquicia Ghost Recon bajo el sello Tom Clancy’s. Variado, grande, y divertido como pocos para jugar con amigos en modo cooperativo, aunque igualmente disfrutable en solitario.

Podría mencionar muchos más títulos como Battle Chasers: Nightwar, La Tierra Media: Sombras de Guerra, RiME… pero se lo dejo a mis compañeros. ¡Hasta la próxima amigos!

 

 

Las categorías de los Game Awards abarcan una gran variedad de géneros, pero sabéis que si hay uno que me encanta, ese es el “nichismo” y por eso os traigo dos propuestas que nunca serían premiadas en unos Game Awards, pero que no pueden pasar desapercibidos entre el enorme catálogo de este año.

Emezaré nombrando a Yakuza 0. La saga creada por Toshihiro Nagoshi recibía, a inicios de este año en el mercado occidental, la precuela donde se nos explicaba los primero pasos del Dragón de Dojima, Kazuma Kiryu. Una obra absolutamente imprescindible para los veteranos de esta saga y una puerta de entrada perfecta para todos aquellos que aún no nos hubiésemos iniciado en esta gran saga. Un argumento que pivota entre dos personajes: el protagonista de la saga, Kazuma Kiryu, y su archienemigo, Goro Majima (quien se lleva la mejor parte en esta precuela).

Estamos ante un beat’em up de mundo abierto, con una ambientación maravillosa (el Kamurocho y Sôtenbori de la década de los 80s es genial), una cantidad de misiones secundarias tan variadas y extenesas como alocadas (clases de sadomaso ante niños es absolutamente impagable) y un árbol de habilidades en los distintos estilos de lucha que hacen que no pueda aburrirte jamás en esta brillante propuesta de Sega para los jugadores de la consola de Sony.

No puedo dejar pasar este año el Danganronpa V3 Killing Harmony. La nueva entrega de esta novela visual de Spike Chunsoft nos depara un curso sobre el asesinato que no tiene igual: un grupo de estudiantes de lo más variados se encuentran encerrados en un instituto y han de asesinarse entre ellos para tratar de sobrevivir. Todo ello coronado con unos juicios para descubrir quién ha cometido el asesinato repleto de giros argumentales que te dejan boquiabiertos y con toda una serie de minujuegos que lo convierten en uno de los juegos más alocados del año. Tu rapidez, reflejos y capacidad de deducción se pondrán en tela de juicio en esta novela visual que se erige en lo mejorcito de su género este año. Está claro que asisitir a clase nunca había sido tan divertido y peligroso. Que no os eche atrás el género porque sorprenderá a propios y extraños.

 

 

Mucho y muy largo de ha hablado y escrito de los Game Awards. Como todos los años, vaya. Y al final, de entre tanta bilis, tanto debate, la única conclusión a la que llegamos todos es que Zelda es lo mejor que ha ocurrido este año. Hechos inapelables aparte, suele ocurrir más a menudo de lo que nos gustaría que echamos de menos esas joyas que parece que sólo nuestro refinado paladar es capaz de apreciar. Y para que no se olviden, aquí os dejo los míos. Personales e intransferibles. O no.

Empezando por el que más me duele, The Last Guardian. La odisea de Trico y “el chico” sigue clavada en mi recuerdo con la misma fuerza. Los oscuros ojos de esa bestia cuando se queda solo para esperarnos mientras nos alejamos en busca del resorte que abra su puerta. Sus músculos y huesos retorciéndose bajo su piel mientras arrancamos las puntas de lanzas de su lomo. Sus gritos de dolor cuando se enfrenta a otros guardianes, y sus jadeos cuando el enfrentamiento termina pero él sigue enfurecido y sufriendo y devastando nuestro corazón al ver como nuestro amigo ahora es un monstruo sin miramientos. Tantos momentos que nunca van a abandonar mi memoria. Cierto es que el título no está exento de problemas pero este es uno de esos pocos casos en los que el 10 no depende del balance entre virtudes y defectos, si no de otras cosas. Cosas intangibles. Cosas de Fumito.

Del mismo modo que los intangibles definen el juego de GENDesign, las virtudes de Wonder Boy – The Dragon’s Trap son claramente visibles en cuanto el juego arranca en mi Switch. Es complicado no otorgar todo el mérito que te cabe en el cuerpo para los grafistas que han dibujado de forma artesanal cada una de las animaciones sobre los gráficos originales, aprovechando la extraña inercia del original para insertar animaciones de retorno que le sientan como un guante, y convirtiendo los chiptunes en adorables melodías. Porque nada puede gustarnos más que un metroidvania de de los de antes, de los que eran realmente crípticos a la hora de presentar sus objetivos y de guiar al jugador por sus entornos. Si existe un camino, un buen camino, para actualizar los juegos que nos maravillaron en el pasado, por favor, que sea como este excelente trabajo de los chicos de Lizardcube.

Y como estos dos títulos, muchos otros quedan en el camino a los Game Awards, ausentes de la entrega de premios, pero siempre presentes en nuestro corazón. Es evidente que nunca vamos a estar de acuerdo en todo. Salvo en que Zelda es lo mejor que ha ocurrido este año, claro.

 

 

¡Muy buenas a todos! Los Game Awards, las nominaciones, y todo eso está muy bien, pero los jugadores peceros, los PC Master Race, que tenemos más FPS que púas Espinete, sabemos que hay vida más allá del GOTY. Por lo tanto os traigo dos recomendaciones de juegos de 2017 que no han sido nominados en ninguna categoría de los Game Awards.

En primer lugar, “Oxygen not included”, un indie 2D de Klei Entertainment (los creadores de Don’t Starve) centrado en la gestión de una colonia en el espacio, donde la clásica superviviencia (comida, agua, oxígeno) se une a la gestión del estrés y la felicidad de los colonos. Un juego difícil y con una estética muy particular.

Para el segundo voy a hacer un poco de trampa, ya que aunque se trata de un juego que lleva en Early Access desde 2015, ha tenido su fecha de lanzamiento oficial en Agosto de 2017. Hablo del archiconocido “Ark: Survival Evolved”, un sandbox de supervivencia en una isla llena de dinosaurios, y con calidad gráfica verdaderamente apabullante, digna sólo de los más potentes seguidores de Gabe Newell.

 

 

2017 ha sido un gran año para la industria del videojuego pese a que algunos iluminados vaticinaran lo contrario. A la hora de escoger mis títulos favoritos de entre los que han pasado desapercibidos, podría haber hecho trampa y seleccionar al todopoderoso Puyo Puyo Tetris (que ha salido por fin este año en occidente, para gozo de A Los Mandos) o la versión de Undertale para consolas (lanzada dos años después del original). Pero quiero dar la oportunidad a juegos nuevos lanzados este año y por eso escojo estos dos:

Título independiente “Night in the woods” mezcla la aventura gráfica costumbrista con las plataformas y diversos minijuegos en un paquete con personalidad propia. La joven gata antropomórfica Mae regresa a su pueblo tras dejar la universidad y allí se enfrenta a su pasado y a sus inseguridades en una trama sobre el desencanto de los millenials o los efectos de la crisis económica, entre otras cosas. Puede sonar depresivo, y realmente no es la juega padre, pero sus encantadores personajes, agudos dialogos, llamativo acabado audiovisual y divertidas mecánicas te pueden ganar. Una experiencia pausada para quienes busquen algo diferente. Está disponible en formato digital para PC y consolas, ahora en una edición que incorpora dos pequeños relatos complementarios que se pueden encontrar en Internet. Próximamente parece que saldrá en físico y en Switch. Para esta última, creo que caerá ^o^

Everything is going to be OK Es un  juego descargable gratuito para PC y Macde la desarrolladora independiente Nathalie Lawhead es sin duda el viaje psicotrópico del año. A primera vista parece un conjunto de minijuegos locos, pero más bien es un compendio de experiencias interactivas pixeladas (y muy personales) sobre cuestiones como la existencia, la sociedad y la autoestima tratadas desde el absurdo. A veces basta con pulsar sobre los elementos en pantalla. Otras veces hay que usar una interfaz de ventanas exclusiva. Y en varios casos, los resultados de tus acciones se plasman en archivos que quedan grabados en el escritorio para su posterior disfrute (como una presentación de diapositivas). ¿Es solo un videojuego o debería catalogarse como videoarte? Sea lo que sea, demuestra las posibilidades del medio para sorprender, innovar en la interacción con el usuario y suscitar un mínimo de reflexión. Bueno, eso y que te echas unas risas con sus locuras, que vale ya de tanto juego serio (y curiosamente de menor calado humano)…

Espero que 2018 nos depare aún mejores juegos tanto en el ámbito de lo popular como en el alternativo. Bueno, y que demos abasto para probar la mayoría 😉

 

Con las nominaciones de los GameAwards recientesel director de esta página, nuestro querido Oscar, se dirigió a mí para pedirme que escribiera estas líneas, tras ver quienes estaban y quienes no en esta lista decidí hablar de dos títulos en concreto: Outlast 2 y The EvilWithin 2. Quiero dejar claro al lector que, en esta ocasión, a diferencia de los análisis que hago para esta página o para Guardado Rápido y que aquí publicamos he decidido no centrarme en ningún aspecto objetivo y hablaros más de mis sensaciones particulares.

Dos títulos de terror sí, pero dos títulos que lo tratan de maneras muy distintas y que me hicieron pasar grandes horas de tensión, miedo y diversión. En el caso de Outlast 2 he de hablar más bien de su trilogía ya que me hice con la edición Outlast Trinity que contenía la primera entrega, su expansión y esta segunda y mejorada segunda parte. No es un juego que se tenga mucho en cuenta en estas quinielas y haber salido el mismo año que ResidentEvil VII lo relega a un segundo plano. Pero no hay que desmerecer la forma en la que Outlast 2 trata el terror con muchas menos herramientas que lo hace la franquicia de Capcom, la historia de este título mucho más completa que en su primera entrega y también más conclusiva, tiene momentos de gran tensión que nos conducen de forma irremediable hacia su enigmático e histriónico final.Recorrer los escenarios cámara en mano con tan sólo unas pocas baterías y recogiendo notas de texto aquí y allá pueden parecer a priori pocos argumentos para desarrollar una narrativa que destaque, pero en combinación con sus escenarios y los deja vú que tienen lugar en momentos puntales de este juego hacen que la experiencia sea asfixiante, que es lo que al fin y al cabo busca Red Barrels. Sus argumentos: explorar, huir y volver a explorar pueden ser a priori pocos para aquellos que no conozcan el título o la saga, pero a quién le guste el terror tiene una cita obligada con estos juegos.

El otro título que traigo es The EvilWithin 2, recientemente analizado en esta misma página recomiendo a quién quiera conocer más que le eche un vistazo. En el caso del título dirigido por John Johanas lo traigo aquí por que ha sabido dar un toque nuevo a un Survival Horror en tercera persona consiguiendo que los jugadores de la primera entrega tuviéramos la sensación estar ante algo nuevo mientras que nos deleitábamos volviendo al psiquiátrico de Bacon o recogiendo los botes de gel verde aquí y allá. Una secuela muy digna que vira hacía la acción, pero en la justa medida de manera que el jugador siga viviendo los momentos de suspense y tensión que fueron signo del primero juego.

Estos son los argumentos por los cuales estos dos juegos que no están nominados en ninguna categoría no deben de ser olvidados por los jugadores

 

Pues me llega el turno de dar lo juegos que pese a no estar en ninguna nominación si que merecen al menos no pasar desapercividos este año. Una de las ventajas que tengo al ser, más o menos, el coordinador de esta pagina es el poder ver los juegos que han comentado mis compañeros, y amigos, e intentar no pisara ninguno de ellos y tengo que decir que estoy bastante en sintonía con mi meseteño favorito y pienso que WonderBoy es un juego que ha pasado injustamente sin pena ni gloria por nuestras consolas siendo una remake jódidamente maravilloso y que no puedo dejar pasar la oportunidad de comentar que hay un juego que aunque si que ha sido nominado no se ha llevado ningún premio y eso me joe bastante ya que SonicMania se merecía sin lugar a dudas ese Premio al mejor plataformas, que este año han disfrazado de “Mejor juego familiar” para poder darle algo a Mario Odissey (aunque el modo 2 player de este juego sea menos que horrendo), y me parece que no veremos otro juego del erizo azul igual en mucho mucho tiempo. Pero dejo de divagar y vamos con mis 2 juegos que son:

Voy a empezar con un juego que me sorprendió muchísimo, que me dio y me esta dando muchas horas de diversión es “The Surge”. Un juego que bebe sin complejos de los “DarkSouls” pero ambientado en un futuro distopico  donde equipados con nuestro “exoesqueleto” lucharemos contra roboticos desprogramados y zombis bionicos para lograr salir con vida de una factoría que se convertirá en nuestra pesadilla particular. Un diseño de niveles muy notable, una curva de dificultad enfermiza, un control perfecto y una historia mas que interesante hacen de este juego un pozo de horas donde la desesperación y la diversión irán de la mano para darnos, entre espadazo y espadazo, la sensación a desafío superado que tanto nos gusta a los jugones de toda la vida.

Por otro lado quiero destacar un juego indie que me pareció un completo y gran descubrimiento por dos motivos: el primero por su loca y maravillosa historia lleno de estereotipos y fijaciones propios de la cultura asiática y por otro lado su pulida jugabilidad que mezcla de forma perfecta los esquemas de los geniales metroidvanias mas adictivos con esa enajenación para los pulgares que son los frenéticos Bullets Hells. Estoy hablando de “Rabi-Ribi” un juego cargado de diversión, risas y chicas Kawaii, con un maravilloso apartado artístico a lo 16 bit o “pixel peferfect” que nos invitara a explorar sus extensos mapeados y cuya única pega es que no ha salido apadrinado por ningún “gran nombre” de la industria pero que os dará, palabrita de jugón, horas de desenfrenada diversión que os ira de lujo entre tanto Triple A.