Análisis Switch: Run, Gore & Cannoli. Invasión Zombie a ritmo de Jazz
18 enero, 2018
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Que los pequeños estudios indies han mantenido e incluso revitalizado algunos géneros dentro de la industria del videojuego ya no es algo anecdótico como hace algunos años, si no que es todo un hecho ya sobradamente contrastado entre los usuarios. Juegos como el frenético Rabi&Ribi, el sobresaliente SonicMania o inmenso el Blossom Tales han conseguido que géneros olvidados por los grandes estudios como son los “run&gun”, los plataformas exigentes o las aventuras de corte clásico vuelvan a brillar con un esplendor que en esta y especialmente en la anterior generación estaba prácticamente extinguido por la marea incesante de Triples A, que lejos de innovar, explotaban hasta la extenuación las fórmulas jugables que estaban de moda. Y tal hazaña no lo han conseguido gracias a grandes presupuestos si no a grandes dosis de imaginación y, lo más importante, creando los juegos a los que ellos querian jugar y que no eran otros que los que habían jugando ya en su infancia. Diseñando, en definitiva, títulos que se alejan de las ideas y jugabilidades que las grandes sagas han preestablecido en estos últimos años.
De esta manera nos encontramos hoy analizando otro título que cogiendo el viejo esquema de acción desenfrenada, explosiones y un alarmante gusto por la destrucción que ya presentaban en su día joyas como “Metal Slug”, y añadiendo un par de toques de cosecha propia, el estudio belga Crazy Monkey Studios consigue crear otro gran juego lleno de pura, loca y simple diversión en 2D.
La historia de “Gun, Gore & Cannoli” parte del corto Belga “Hell Bent for Whiskey” y aunque no es una continuación ni precuela de este si que con el que comparte tanto protagonista como muchos de los escenarios y enemigos que veremos en nuestra aventura. En él nos convertimos en Vinni Cannoli, un sicario de la mafia que llega a la ciudad de Thugtown, en plena época de la ley seca, para hacer un trabajo encomendado por el mismisimo Sr. Belluccio: encontrar a un tal Frankie y llevarlo ante el cueste lo que cueste. Pero al llegar a la ciudad pronto nos damos cuenta de algo no va demasiado bien en Thugtown, hordas de zombis invaden la tranquila ciudad portuaria y se interponen entre nosotros y nuestro objetivo. Pero somos Vinni Cannoli y no importa lo que pase, siempre acabamos nuestro trabajo. Sí, es una trama sencilla y sin muchas pretensiones, y es una simple excusa para que esto no sea un mata mata alocado, el juego es consciente de ello y sabe reírse de si mismo llenando los diálogos con cientos de clichés que nos arrancarán una carcajada en mas de una ocasión.
Jugar a “Gun, Gore & Cannoli” es extremadamente sencillo, nuestro objetivo será recorrer el escenario de izquierda a derecha disparando a todo lo que se mueva. Para ello contaremos con un enorme arsenal que iremos recogiendo por el camino y que nos hará falta para enfrentarnos no sólo con las hordas de zombies que nos saldrán al paso si no que nos serán de gran ayuda con los jefes “fin de fase” que nos encontraremos en determinados puntos de nuestro viaje. Es verdad que no se desvía ni un milímetro de la esencia y esquema de los grandes “Run&Gun” de todos lo tiempos, pero como dicen en mi pueblo “si algo funciona bien, no intentes arreglarlo”. Controlar a Vinni es igual de facil,sencillo y divertido. Botón de disparo, salto, arma secundaria (coctel molotov y granadas), recarga y otro para dar patadas, este último de gran ayuda pues nos permitirá alejar a los enemigos durante unos preciosos instantes mientras recargamos el arma. Este sencillo sistema de control no esta exento de problemas y nos encontramos con que nuestro protagonista solo es capaz de disparar en horizontal. Esta decisión, que no entendemos, nos dejara vendidos en más de una ocasión y tendremos que estar combinando salto y disparo para poder dar a un enemigo que esta simplemente subido a una mesa. Un punto muy positivo es que el juego cuenta con algo que ya no estamos acostumbrados a ver en un y es un apartado multijugador cooperativo LOCAL de hasta 4 jugadores, todo un acierto ya que jugar “Gun, Gore & Cannoli” en compañía de otros 3 amigos es una experiencia realmente divertida.
En el apartado visual el juego es toda una delicia. Estamos ante un juego muy llamativo que cuenta con un look “muy comic” que nos cautivara desde el primer minuto. Tanto los personajes como los fondos están pintados a mano y cuentan con un gran nivel de detalle contando con unas animaciones, que sin ser ninguna maravilla, encajan de perfectamente y dan esa sensación tan de dibujo animado que va buscando el juego. Se nota el cariño que Crazy Monkey ha puesto a la hora de desarrollar el juego y el mimo con el que ha tratado cada elemento que vemos en pantalla. Quizas lo unico que podríamos achacarle al juego, y eso seria poniendonos muy puntillosos, es la escasa variedad de enemigos. En la parte del diseño de sonido el juego nos da una de cal y otra de arena. Por el lado positivo cuenta con un excelente doblaje, solo en ingles, y con unos efectos de sonido tan variados como cuidados. Armas, disparos, explosiones, crujidos, gritos…todo se oye como se debe de oir y tienen una calidad que roza el sobresaliente. En el otro lado de la balanza nos encontramos con una banda sonora, que si bien esta acorde con la historia que nos cuenta pues se trata de melodías de jazz al más puro estilo de los años 20 tenemos que decir no encajan para nada con la acción del juego en ningún momento.
Los chicos de Crazy Monkey Studios pueden dormir con la conciencia tranquila ya que han creado un juego que está a la altura de lo que promete y esto es diversión, diversión y más diversión.Toda una oda a los arcades que triunfaron en los 90 en los salones recreativos y que tantas monedas perdimos en ellos. Es verdad que el juego no es perfecto y que cuenta con varios fallos que lo lastran y aunque, como ya hemos dicho, no inventan la rueda si que saben como hacerla girar para que funcione de forma más que correcta y que si bien es cierto que no va a ser el juego que nos cambie la vida si que nos tendrá pegados a nuestro mando durante todo lo que dura la partida.
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A Favor
- Acción loca y desenfrenada
- Un diseño artístico maravilloso
- El carisma del protagonista
- Su apartado multijugador
En Contra
- Excesivamente corto
- La falta de movimientos como el apuntado en diagonal
- La BSO no termina de encajar
