Análisis de Uncharted: Colección Legado de los Ladrones

Uncharted 4 (2016) supuso, con poco lugar a dudas, el paso que la saga protagonizada por Nathan Drake necesitaba. La aventura pulp por excelencia de los videojuegos pedía a gritos separarse de los elementos sobrenaturales que en mayor o menor medida habían permeado en sus entregas anteriores. Era hora, creo yo, de crecer, de madurar y de aceptar el paso del tiempo es algo con lo que hay que vivir. Y es precisamente esa la temática que, debajo de todos los tiros, explosiones, y saltos imposibles, se trataba en el último título numerado de la saga.

Y fue un éxito rotundo a todos los niveles, claro. Naughty Dog nos brindó un juego que era excelente a muchos niveles, empezando por el técnico y artístico, exprimiendo como nunca antes se había hecho la PS4, y además creó el que a día de hoy es el mejor título de la saga en cuanto a tratamiento de sus personajes. Uncharted 4 es una montaña rusa donde en un momento estás con la adrenalina disparada mientras disparas a diestro y siniestro y al siguiente estás con nudo en la garganta porque el guión te acaba de dar otro revés.

No se conformaron “sólo” con eso, porque además había en desarrollo un DLC que, como la mayoría ya sabréis, se les fue de las manos y se convirtió en El Legado Perdido, un juego independiente que condensa todas las cosas buenas de la saga Uncharted en una aventura muy recogidita pero con entidad propia y que bien podría haber sido planteado como tal desde un principio y a nadie le hubiera molestado lo más mínimo.

¿Qué bien todo, no? Pues sí, joder, todo fenomenal. Lo único que echábamos de menos era poder jugarlo en nuestra PS5 a 60 frames por segundo. Pero ay amiguetes, ya podemos dejar de echarlo de menos porque aquí nos llega La Coleccion Legado de los Ladrones que es una compilación de ambos juegos en un sólo disco y con todo lo bueno y lo bonito de tener el juego en PS5.

Esto es, tres modos gráficos para elegir entre fidelidad extrema a 4K, rendimiento equilibrado a 60 frames por segundo o rendimiento extremo a 120 frames si nuestra tele da la talla, claro. Ojo, que a mí con esto ya me iba bien, pero es que hay más. Hay implementación de gatillos adaptativos y vibración háptica, que se nota sobre todo en el Legado Perdido usando cierto objeto que nos ayuda a localizar tesoros, y lo que para mi gusto hace de esta colección una adquisición obligada si tienes unos auriculares adecuados, el sonido 3D.

Uncharted 4 y El Legado Perdido, pero sobre todo el primero, cambió los tiroteos para convertirlos en pequeños campos de batalla en los que era tan importante el cubrirse y obligar a nuestros enemigos a salir de sus escondrijos, como el moverse, flanquear al contrario y tener claro que ellos iban a hacer muy probablemente lo mismo. Ahora gracias a mis cascos Pulse 3D puedo percibir que ese balazo me ha llegado desde detrás a la derecha, en una posición elevada. Es el juego que hasta ahora mejor me ha transmitido esa sensación y es, de verdad, un paso adelante en inmersión y en game feel.

Huelga decir que si tienes una PS5 y nunca has tocado estas dos maravillas, ya estás tardando en salir corriendo a tu tienda más cercana a pagar LO QUE SEA QUE TE PIDAN por este recopilatorio. Pero ojo, ojo. Que si tienes cualquiera de los dos, físico o digital (salvo que sea la versión de la Plus Collection), por 10 euros puedes actualizar a la colección completa. Por si no queda claro, si tienes únicamente Uncharted 4 y pones 10 del ala, tienes AMBOS JUEGOS en formato digital. Un chollo, si me preguntáis a mí.

La colección El Legado de los Ladrones incluye dos juegos absolutamente excelentes para poder disfrutarlos en su mejor versión, y cierra un círculo no solamente en cuanto a la historia de sus personajes, si no también en cuanto a una ausencia en el catálogo de PS5 que no alacanzábamos a entender. Una ausencia que por fin hemos dejado atrás, con un lanzamiento que homenajea el legado de una de las sagas más importantes de los últimos años. Podríamos decir que es “poco ambiciosa”. Pero qué demonios, son juegos difícilmente mejorables. No pequemos de avariciosos y disfrutemos de esta “pequeña” mejora para uno de los juegos más grandes de la generación anterior.