Análisis Back 4 Blood
2 noviembre, 2021
Back 4 Blood es una apuesta enfocada 100% al juego cooperativo. Esa es la gracia de Back 4 Blood, y en definitiva de todos los juegos multijugador, juntarse con los colegas, enfrentarse a situaciones imposibles y superarlas colaborando entre todos como buena mente se puede, riéndote a cada paso y disfrutando de cada sesión, en definitiva pasando un buen rato. Por que la mayor baza de Back 4 Blood es disfrutarlo con amigos porque las pegas y males que pueda tener el juego, normalmente inherentes a juegos de este genero, de repente desaparecen y por norma general todo lo malo que pueda haber ya no es tan malo y lo bueno, ahora, ya es magnifico.
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Esto que te comento te puede parecer una perogullada de primero de “gamer” pero es que es una realidad. Si vas pensando en ir a lo tuyo , pasar del equipo y avanzar “a tu aire” este es un juego que no solo no vas a sacar provecho sino que no lo vas a disfrutar. Me he encontrado a bastantes jugadores así durante mis partidas y termina pasando que al final se salen de la partida o se quedan solos durante la misma. Enfrentarse a él como en una experiencia en solitario es una “cagada” ya que el juego no esta pensado para jugarlo así y se nota. Los bots son un autentico coñazo, no ayudan, van a su aire, el juego es muy difícil y al final las situaciones que presentan se vuelven repetitivas y monótonas. Y esto es así porque la experiencia Back 4 Blood, sucesor espiritual de los Left 4 Dead, esta diseñada plenamente a la colaboración con el resto del equipo. Cuanto más integrado estés en tu “pelotón”, mejor jugador serás y mejor se desenvolverá tu equipo durante los distintos actos del juego. El juego confía toda su diversión en colaborar con tu equipo, hacer estrategias y distribuirse el trabajo. Cuanto mejor desempeñes tu rol más efectivo serás y más satisfactorio será ir superando las misiones de las que se compone los cuatro actos del juego.
Y esta es una parte, la de definir tu papel en el equipo, que Black 4 Blood soluciona con bastante solvencia pese a usar un sistema, el de cartas, que no se molesta en explicar y que en las primeras horas del juego es más un engorro que una ayuda. Esto es así porque al principio parecen poco útiles, y tardas en entender que estas cartas son los típicos potenciadores que solemos encontrar en cualquier árbol de experiencia y que irán marcando nuestro progreso como jugador. Iremos creando nuestra reserva de cartas y con ella, al inicio de cada ronda, crearemos nuestras “manos” con las que orientaremos a nuestro personaje a un rol u otro. De esta manera podremos crearnos, para una misión determinada, un tanque con mucha vida y que equipado con una recortada será ideal para defender posiciones o bien por el contrario podemos invertirlo todo en resistencia para hacer un ágil atacante que se mueva rápido por el escenario limpiando de zombis a media distancia con un subfusil o quizás dotarlo de potenciadores destinados al uso de habilidades con un buen rifle de francotirador. No voy a decir eso de “el cielo es el limite” porque el sistema de momento no da para tanto pero si es cierto que con el cada misión puede la podemos plantear de un modo distinto propiciando la rejugabilidad del titulo.
Pese a que el sistema de modificadores es lo más llamativo del titulo no podemos olvidar que estamos hablando de un shooter y este es realmente el núcleo de su jugabilidad. En este aspecto podemos respirar tranquilos ya que el gunplay esta muy bien resuelto, no esta refinado a niveles extremos como en sagas consagradas como Borderlands pero el titulo se defiende muy bien. Los movimientos son agiles, el cambio de armas ágil y su uso esta muy bien diferenciado. Se nota el “peso” de cada arma, usar una recortada no tiene nada que ver a usar un subfusil. Los tiempos de carga, la cadencia de disparo y, por supuesto, de recarga están totalmente diferenciados y ajustados a cada tipo de arma. Esto ayuda mucho a elegir nuestra arma favorita con la que desenvolvernos en los escenarios.
Pero sin duda el que, para mí, ha sido un acierto ha sido el diseño de niveles en el que siempre iremos buscando la verticalidad para ganar una posición de ventaja. Diría que el juego nos invita a explorarlos pero la palabra que más se ajusta a la realidad es que nos empuja a ello. Tendremos que recorrerlos de arriba a bajo para buscar en todo momento municiones y vida. Alterna bastante bien entre pasillos y zonas abiertas y pese a que sabe esconder bien sus cartas a las pocas partidas ya sabremos identificar que escenario es propicio para que venga una horda zombie y en cual podemos estar, más o menos, tranquilos. Pese a todo lo bueno de su diseño al final todos se resumen a ir del punto A al punto B pero han sabido intercalar por el camino situaciones en las que nos obligarán hacer algún objetivo siempre bajo la presión de estar repeliendo el envite de la horda. Poner una carga explosiva o derribar la entrada de una mina a cañonazos, la idea siempre suele ser la misma aunque el desarrollo es distinto. Además la situación cambia depende de nuestro rol dentro del equipo con lo que la sensación de no estar haciendo siempre lo mismo tarda mucho en aparecer. Por supuesto el juego tiene pegas, un menú diseñado específicamente para ir en contra de la lógica y la usabilidad, una dificultad que en ocasiones raya la demencia, una IA más tonta que pifio y un sistema de progresión que no te deja avanzar en el apartado online hasta que no cumplas con ciertos requisitos son pegas que no hacen bajar la calidad del titulo pero si empañan la experiencia final.
No puedo terminar esta review sin hablar de un apartado gráfico que cumple bastante bien con lo que promete. Llenar de acción la pantalla a base de cientos de zombis, disparos, explosiones y otros eventos mortíferos sin que el juego se resienta. En ningún momento durante mis partidas, en una Series X, el juego ha rascado o ha dado algún fallo gráfico y siempre ha funcionado a 60 fps. Esto es algo de elogiar dado el tamaño de algunos zombis que se unen a la fiesta de la sangre y el desmembramiento aunque hay que decir que el juego tira mucho de la niebla para que la distancia de dibujado no sea excesiva, mas bien corta, y favorecer que la carga gráfica no se desboque. A nivel sonoro el juego también es impecable, con una banda sonora al más puro estilo del cine de serie B y un doblaje al castellano excelente.
En su día no jugué a los famosos Left 4 Dead con lo que no se decir si el juego esta o no a su altura pero lo que si os puedo decir que Back 4 Blood es la mejor experiencia cooperativa que hay a día de hoy en consolas de nueva generación.
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Back 4 Blood
A Favor
- La gestión de roles dentro del equipo.
- Su divertido gunplay.
- Diseño de niveles.
- Doblaje excelente.
En Contra
- La IA de los bots.
- El sistema de progresión y desbloqueo online.
