Análisis Marvel’s Spiderman: Miles Morales
24 noviembre, 2020
Hay pocas ocasiones en las que reescribo o cambio por completo la cabecera o entradilla de una reseña. Normalmente suelo plasmar en estas líneas la idea general del mensaje que me ha querido transmitir el juego y suele ser una de las pocas cosas que no se alteran tras las continuas revisiones que hago en mis textos. Esta es, desgraciadamente, una de esas ocasiones. No ha sido porque haya cambiado de parecer con respecto al juego, nada más lejos de la realidad. En un principio pensaba hablar del revuelo que ha venido armando la arañita desde su anuncio el pasado junio pero me sentí en la “obligación” de cambiarlo tras comentar con un amigo los pros y los contras de esta nueva interacción de nuestro “amigo y vecino”. Este buen hombre me comentaba que muchos análisis que había leído tachaban el juego de continuista, de no traer novedades o de ser poco innovador con respecto a la anterior entrega. He de admitir que no termino de entender ese tipo de críticas. Querer una segunda parte, una continuación de “algo” para luego pedir que sea diferente simplemente no tiene sentido. Si algo es una continuación no puede ser distinto, ha de ser igual, muy similar pero nunca diferente. Ese tipo de acusación son más recalcitrantes viniendo de gente que se supone “saben del medio” y encima “cobran” por lo que escriben. Y es que precisamente pedir innovación y ruptura a Spiderman: Miles Morales es una solemne estupidez, porque seamos sinceros Spiderman: Miles Morales “a stand alone game” arranco muy posiblemente como un DLC que, gracias a dios, acabo llendose de las manos para terminar siendo un juego con entidad propia. Spiderman: Miles Morales no innova, no trae novedades y es continuista con respecto a su anterior entrega y yo doy gracias por eso.
Tanto bebe de su anterior entrega que los primeros minutos de este juego arrancan compartiendo protagonismo con Spiderman/Peter Parker. Miles Morales está aprendiendo a ser un héroe y vamos a seguir los pasos de Miles Morales/Spiderman en su primera gran aventura en donde tendrá que demostrar que es capaz de quitarse el sobrenombre de “el otro Spiderman”. Es el viaje de un héroe que ha de ganar entidad propia, que ha de dar un paso adelante, que se puede llamar simplemente Spiderman. El equipo guionista comparte nombres con el anterior así que ya os podéis imaginar, que aunque esta sea otra historia de orígenes, esta genialmente escrita y magistralmente orquestada. La narrativa del juego va a bastante más velocidad que Marvel’s Spiderman, en pocos minutos ya tenemos bastante claro quien es quien en esta aventura y no hay giros de guión que no los veamos venir desde lejos. Es cierto que contamos con una Nueva York que visitar y explorar, pero al tener una duración bastante menor, dependiendo de la prisa que tengas te durará de 7 a 12 horas, el juego va al grano bastante más rápido.
E igual de rápido nos adaptaremos al manejo de Miles mientras se balancea entre los edificios. Jugablemente no notarás el cambio si vienes de controlar al bueno de Peter Parker. El sistema de combate se mantiene intacto aunque como es de esperar se le añaden los movimientos especiales propios de Miles Morales como los ataques con bioelectricidad que darán lugar a devastadores combos capaces de dejar aturdidos a enemigos o que serán indispensables para derrotar a otros o la capacidad de volverse invisible. Esto último dará mucho juego pues vendrá de perlas en los momentos de infiltración dándole ese plus de sigilo que flojeaba en la entrega anterior. Por supuesto también contamos con una gran ciudad que explorar, crímenes que detener y desafíos que completar. Por otra parte Miles también se fabricará sus propios los artilugios como minas, holodrones que nos ayudarán bastante durante nuestras peleas, son menos que en Spiderman pero igual de efectivos. Algo similar pasa con el árbol de habilidades, potenciará nuestros ataques pero tendremos la sensación de que se queda algo escaso.
Pero si algo puede presumir este Spiderman: Miles Morales es de lo terriblemente bien que se ve este juego. En la redacción lo hemos jugado en su versión de PS4, no disponemos aun de PS5, y viendo este juego dudamos de si realmente hacía falta dar el salto generacional. Los diseños de los personajes, animaciones faciales, fluidez de combate, detalle de los escenarios todo luce espectacular y supera con creces lo visto en el juego de 2018. Lo mejor sin duda son los efectos de luz que se han implementado y de los que disfrutaremos mientras nos balanceamos por la ciudad pero donde realmente lucen bien es cuando se usan para los ataques y combos “veneno” de Miles Morales. Es en esos momentos donde vemos que este juego estaba pensado para lanzarse en PS5 porque el uso que hace, o que hará, del ray tracing es una autentica locura. Por supuesto, y como no esperábamos otra cosa viniendo de un estudio de Sony, el juego llega con un doblaje al castellano a la altura con una elección de casting, una vez más, correctisima y una dirección de doblaje de la que tendrían que aprender otros grandes estudios que les da por no doblar sus juegos.
Como podéis comprobar no he hablado nada malo de Spiderman: Miles Morales. Y eso es básicamente porque es un juego igual de bueno que su anterior. Con una historia tan buena como aquella, una jugabilidad igual de buena y una banda sonora igual de trepidante hacen que me pregunte como es posible que se le ponga menos nota… como mínimo, y como es en este caso, tiene que llevar la misma. No se, quizás aun no estoy preparado para escribir en las grandes ligas, lo que si que sé es que Spiderman: Miles Morales es un juego con suficiente personalidad y entidad propia para considerarse una digna continuación del exclusivo de 2018 y, lo que es más importante, una de las grandes excusas para comprarse una PS5.
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Marvel's Spiderman: Miles Morales
A Favor
- Visualmente impactante.
- Añade mecánicas como el sigilo.
- Muchas cosas por hacer.
En Contra
- Algo corto.
