Análisis PS4: Blackguards 2. Más y mejor en todos los sentidos.

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Tras su paso por PC, Blackguards 2 aterriza en las consolas de la actual generación prometiendo superar en todo a su antecesor proponiendo un sistema de juego que sea atractivo y ágil para los usuarios de PS4 y ONE. ¿Lo han conseguido? Vamos a verlo.

La historia sucede tras los hechos de la primera entrega. Manejaremos a Cassia que ha sido encarcelada y desterrada al olvido por Marwan, quien ha usurpado el Trono de Tiburón que por derecho le pertenece a nuestra protagonista. Tras años en las mazmorras Cassia decide escapar y atravesar el laberinto de calabozos, reunir a un ejército, recuperar ciudad a ciudad su reino y derrotar a Marwan para reclamar el trono.

Estamos ante un juego de Rol por turnos clásico. Esto lo decimos ya y sin paños calientes para no llevar a error a ningún lector  y esto tiene tantas cosas positivas como negativas. Así pues en las zonas de combate nos encontraremos ante un mapeado dividido en celdillas asemejándose a un tablero como el que veríamos en un juego de mesa. Nuestra protagonista y los mercenarios que vamos encontrando y uniéndose a nuestra causa dispondrán de una serie de puntos a gastar entre movimientos y ataque en cada turno. Como era de esperar este tipo de de sistema hace que el juego en estas partidas se vuelva muy estratégico. Tendremos que tener en cuenta tanto las habilidades y número de movimientos de nuestros héroes así como su situación en el tablero como las de los enemigos a los que nos enfrentemos. Esto que puede parecer mucho lio se nos explicara en un completo tutorial que hará las veces de primera fase manejando a Cassia huyendo de las mazmorras.

Este tipo de sistema por turnos conlleva una parte negativa que quizá puede alejar a los jugadores más novatos y es su extremada lentitud. Una vez hagamos nuestros movimientos tendremos que esperar ya no solo a que nuestros enemigos hagan los suyos sino que también tendremos que esperar que los hagan las partes móviles que pudiera tener el escenario. Aquí se echa en falta una opción para poder saltar estos movimientos de la CPU pues ralentiza mucho el ritmo, ya de por si pausado, del juego.

Conforme vamos ganando experiencia iremos obteniendo puntos de habilidad. Estos puntos los podremos invertir en un árbol de habilidades muy completo. Daedalic toma nota de los fans de los juegos de mesa y ha implementado un sistema muy profundo donde no solo podremos aprender nuevas magias y movimientos o invertir en mayor Stats para nuestros personajes si no que también incorpora una rama para uso y manejo de armas mejorando la destreza de nuestro personajes tanto en el manejo como en la defensa con dicha arma.

Entre combates y combates podremos “descansar” en las ciudades. En ellas el juego cambia a un estilo tipo “Click&Point” donde podremos interactuar con diversos PNJ para comprar y vender objetos o aprender nuevos hechizos.

En el aspecto grafico del juego poco podemos exigir a este tipos de juegos. El motor 3D usado mueve sin mucho esfuerzo todas las unidades puestas en pantalla y presenta unos escenarios bastante variados y con multitud de partes móviles. Si tuviéramos que ponernos quisquillosos podríamos decir que se echan en falta unas animaciones más variadas y fluidas ya que el juego se muestra bastante parco en este aspecto. También tenemos que decir que la cámara no es todo lo libre que nos gustaría que fuera y que la calidad de las texturas es, siendo generosos, muy justita.

En el apartado sonoro una de cal y otra de arena. Por un lado tenemos un excelente doblaje (al ingles) con voces variadas que denota un esfuerzo por parte de Daedalic de dar calidad al producto y por el otro tenemos una música que pasa completamente desapercibida sin tener ningún tema épico que seamos capaces de retener en nuestra memoria apenas unos minutos al acabar la partida. Los que no dominéis el idioma de Shakespeare no os preocupéis ya que el juego viene totalmente subtitulado al español, cosa que se agradece, ya que en juegos tan minoritarios como este no es normal que suceda.

Como conclusión tenemos que decir que Blackguards 2 dá ni más  ni menos que lo que promete. Más y mejor que su primera entrega. Mas grande, más variado, más divertido y con más cosas que hacer. Un juego que gustará tanto a los a los amantes de los juegos de combates por turnos como X-com como a los fans de los juegos Rol más tradicionales pero que puede espantar al usuario más “casual”, aunque también es cierto que tampoco son su target. Una buena opción que llega para reivindicar un genero cada vez más presente en el mundo de las consolas.