Análisis de Horizon Forbidden West – Burning Shores
10 mayo, 2023Horizon Forbidden West se completa con el DLC The Burning Shores
Horizon Forbidden West es un éxito incontestable. Y del mismo modo que su antecesor, lo más probable es que tras superar la aventura de Aloy, aún nos queden multitud de tareas y misiones pendientes de completar. Y eso en Guerrilla lo saben, por lo que al igual que hicieron con Zero Dawn, esta buena gente nos trae un DLC para aliñar, y de qué manera, el endgame del juego.
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No deja de resultarme curiosa cuando menos la decisión de hacer obligatorio el haber completado la quest principal para acceder a este nuevo contenido. Y es que tanto Frozen Wilds como, por ejemplo, la expansión de la Isla Iki en Ghost of Tsushima, eran accesibles completando aproximadamente un cuarto del juego. Es una decisión, creo yo, medianamente arriesgada, porque recordemos que el porcentaje de jugadores que terminan los juegos es bajo, más aún en un título del tamaño y la profundidad de Horizon Forbidden West.
En cualquier caso, es la decisión que narrativamente tiene más lógica, dado que más allá de una trama principal que no es especialmente interesante, este Burning Shores deja las semillas de lo que vendrá en la inevitable tercera parte que presumiblemente cerrará la historia de Aloy.
Y ahora, la pregunta del millón: ¿qué aporta The Burning Shores al ya enorme, expansivo y completísimo contenido de Forbidden West? Pues en mi opinión, bastante. Empezando por un apartado gráfico muy MUY mejorado. Es bastante notorio que todo este territorio y todos los NPCs que lo pueblan han sido creados expresamente para PS5, dejando (al fin) atrás el enfoque intergeneracional. La cantidad de partículas flotando, de elementos móviles y dinámicos, y de efectos de iluminación que vamos a encontrar en la costa de Los Ángeles supera y por mucho a los que podemos ver en el juego base, y las animaciones faciales, empezando por nuestra protagonista y acabando por el último NPC son, a falta de una palabra más elegante, ACOJONANTES.
En lo que al personaje de Aloy se refiere, tendremos más y mejores habilidades, armas, y oleadas de valor con las que dar matarile tanto a máquinas como a humanos. Nuestra protagonista es más letal que nunca, y llegado cierto punto seremos como un rodillo que pasa por encima de los enemigos como si fueran mantequilla derretida. No es precisamente desafiante, pero que me aspen si no es divertido practicar el genocidio campamentos enteros como si estuviéramos dando un paseo por el parque.
Pero no es sólo eso, no. Lo capital de esta expansión, lo que más me ha gustado, vuelven a ser las criaturas. Los dinobots, vaya. Guerrilla ha creado un buen puñado de nuevos seres mecánicos que se suman a la enorme variedad que ya teníamos en FW, y que aumentan y mejoran la cantidad y calidad de encuentros a la hora de cazarlos y domarlos. Todo es AÚN MÁS emergente, más natural, más orgánico. Y se disfruta sobremanera a la hora de enfrentarse a ellos, ya sea con sigilo, a pecho descubierto, o emboscándolos con trampas. Excelentes son además los bosses, que aúnan con mucho tino el combate con los puzzles, exigiendo ir con nuestro arsenal bien preparado y además estar atentos y astutos para entender sus puntos débiles y las ventanas de castigo. Y no puedo dejar de mencionar el último enfrentamiento, que es de una escala francamente monstruosa, dando lugar a un combate y un clímax de lo más épico, con un epílogo muy emocional, que a mí personalmente me parece precioso.
Épico, de hecho, es la palabra que mejor define el resultado final de este Horizon Forbidden West – Burning Shores. No sólo es un complemento excelente para el final del juego, con una misión principal que puede llevarnos unas 12 horas. Es también un añadido espectacular que complementa el juego principal a todos los niveles y que nos da más de lo mismo, pero mejor. Que en opinión de este que os escribe es lo mejor que puede ocurrir con este tipo de contenidos descargables. La saga Horizon cierra su segunda parte con The Burning Shores, y sigue su camino con paso firme hacia el Olimpo de franquicias triple A de PlayStation. Y ahí voy a estar yo esperando el final de la trilogía. Día 1.
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