Leyendas Pokémon: Z-A. Análisis

Leyendas Pokémon ZA, reinventado su propia rueda.

Han pasado ya tres años desde Pokémon Escarlata y Púrpura, y muchos (yo incluido) empezábamos a pensar que Game Freak se había quedado sin ideas. Pero el pasado 16 de octubre, Nintendo y Game Freak nos sorprendieron con algo diferente: Leyendas Pokémon Z-A. Eso sí, el lanzamiento no fue precisamente tranquilo. Días antes, internet se llenó de filtraciones y spoilers, y la decisión de no lanzar el juego con hora global no cayó nada bien: mientras en Australia ya estaban capturando Pokémon, aquí en España todavía mirábamos el reloj con ansiedad. Aun así, una vez tuve el juego en las manos, esa frustración desapareció rápido. Leyendas Pokémon ZA no solo es una entrega más: es una reinvención valiente de lo que significa ser entrenador Pokémon.

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La acción transcurre en Ciudad Luminalia, una metrópolis que mezcla tecnología, caos y nostalgia a partes iguales. Si jugaste Pokémon X/Y, seguro que te invade cierta familiaridad: las calles, las luces y esa sensación de estar en el corazón del mundo Pokémon. Pero ahora, algo anda muy mal. Extraños cristales energéticos están apareciendo por toda la ciudad, alterando el comportamiento de los Pokémon y provocando evoluciones fuera de control. En medio de este desastre, la corporación Quastelar S.A. intenta diseñar un plan para restaurar la armonía entre humanos y Pokémon, aunque (como suele pasar) sus verdaderas intenciones no están del todo claras. Nuestro papel es el de un joven investigador que se une a este proyecto. Desde los barrios más bajos hasta las zonas más lujosas, debemos descubrir el origen de los cristales, enfrentarnos a Pokémon desbocados y entender qué está corrompiendo la energía vital de Luminalia.

Lo mejor de todo es que, por primera vez en años, la historia tiene peso y matices. Ya no se trata solo de ganar medallas o derrotar a un equipo malvado; hay temas más adultos en juego: el abuso del progreso tecnológico, la convivencia entre especies y el equilibrio con la naturaleza. Es una trama que, sin dejar de ser Pokémon, conecta más con quienes crecimos con la saga.

Y ahora llega el momento donde Leyendas Pokémon ZA rompe con todo. El juego abandona por completo el clásico sistema por turnos y apuesta por un sistema de combate en tiempo real con tiempos de recarga (Cool Down). Suena arriesgado, y lo es, pero funciona sorprendentemente bien. Los enfrentamientos se sienten ágiles, intensos y mucho más estratégicos. Ya no vale solo con elegir el ataque correcto: importa el momento, la posición y cómo gestionas tus habilidades. Si vienes de juegos como Leyendas Arceus, notarás que esto va un paso más allá.

Otro cambio importante: no hay gimnasios. En su lugar, existe una clasificación de la Z a la A, un sistema que mide tu progreso y reputación dentro de la ciudad. Al principio cuesta acostumbrarse, pero una vez te metes en la dinámica, engancha bastante. Y, aunque toda la historia ocurre dentro de una única ciudad, Luminalia está tan viva y llena de cosas por hacer que no se echa de menos una región entera. Cada barrio tiene su propio estilo, sus secretos y su fauna Pokémon. En resumen: Game Freak se ha atrevido a evolucionar su fórmula, y eso, viniendo de una saga tan conservadora, ya es motivo de aplauso.

Lo hemos jugado en Nintendo Switch, y sinceramente, me ha sorprendido lo bien que se mueve. Nada de caídas de frames constantes ni bugs visuales como en Escarlata y Púrpura. Se nota que han aprendido de sus errores. Gráficamente no llega al nivel de Switch 2, pero el diseño artístico compensa con creces. Luminalia tiene vida, luces, reflejos, tráfico, gente… y los Pokémon deambulan por las calles de una forma muy natural. El diseño sonoro también merece mención: desde el murmullo de la ciudad hasta las melodías que acompañan cada zona, todo contribuye a crear una atmósfera inmersiva.

Como jugador que lleva más de veinte años entrenando Pokémon, puedo decirlo sin miedo: Leyendas Pokémon ZA es lo más fresco, valiente y necesario que le ha pasado a la saga en muchísimo tiempo. No es perfecto —hay momentos algo vacíos y mecánicas que podrían pulirse—, pero transmite algo que creíamos perdido: la emoción de descubrir un nuevo mundo Pokémon. Si creciste con la Game Boy en las manos y te habías alejado un poco de la franquicia, este es el título que puede hacerte volver.

En definitiva, Leyendas Pokémon ZA es una carta de amor a los fans veteranos, una mezcla de nostalgia, innovación y aventura que demuestra que Pokémon todavía tiene mucho por decir.