My Memory of Us. Una lección de sutileza y buen gusto.
26 octubre, 2018Análisis PS4
Hemos sido testigos indirectos de la segunda guerra mundial gracias las continuas representaciones que hemos tenido en cine, series, novelas y cómics. El videojuego como otro medio audio visual más también nos ha permitido ver las barbaries ocurridas en la guerra que asoló Europa a mediados del siglo pasado. Pero gracias a las virtudes de este medio hemos podido ser, de algún modo, participes en mayor manera de las historias que los estudios nos querían contar. Hemos revivido la historia tras la mirilla de un soldado, hemos sobrevivido al desembarco de Normandia rifle en mano, hemos ayudado a la resistencia francesa o hemos comandado tropas aliadas. Año tras año han aparecido juegos que quieren hacernos participes de la épica lucha del ejército aliado. Pero la grandeza de los videojuegos es que gracias a su gran potencia narrativa también pueden contarnos la historia desde otro ángulo, desde otro punto de vista más alejado de la fantasía y más cercano a la realidad…desde un punto de vista más humano. Ejemplos de esto último serían juegos como Valiant Hearts o el próximo 11-11: Memories Retold.
My Memory of Us comienza con el viaje de una niña que atraviesa su moderna ciudad para llegar a su librería favorita. Una vez en ella y tras rebuscar encontramos un curioso libro que despierta la curiosidad de la niña y los recuerdos del viejo encargado de la tienda. Comenzará entonces un viaje a través de la memoria de nuestro anciano amigo que nos trasladará a su infancia para contarnos una historia de amistad, de inocencia y de cómo todo cambia en un segundo cuando el Rey Robot invade el país sembrando el terror y la destrucción.
La fuerza narrativa del juego va tomando fuerza conforme avanza. Somos testigos de cómo cambia todo, del antes y después de la invasión, vemos los bombarderos pasar y sembrar el cielo de bombas, recorremos la oscuridad de los túneles para llegar a la seguridad de un refugio antiaéreo, asistimos a la persecución de inocentes, vemos los prisioneros, la opresión… nada que no nos hayan contado antes, como ya hemos dicho, pero lo original de su planteamiento es que lo vemos a través de los inocentes e incrédulos ojos de unos niños de apenas 10 años que no terminan bien de entender que es lo que está sucediendo.
Juggler Games lo cuentan todo con una delicadeza exquisita. No vemos nombres, ni simbología, ni referencia pero a ojos de todos veremos una referencia tácita a la invasión y holocausto que sufrió Polonia por parte de la Alemania nazi en 1939. La invasión relámpago por tropas alemanas, la opresión que sufrió la población judía, los guetos, las desapariciones, los secuestros… todos los horres de los primeros compases de la locura megalómana de Hittler están aquí pero pasado por el filtro de unos niños que no comprenden el por qué de los horrores que les ha tocado vivir. Estamos ante una verdadera lección de historia que se oculta tras ese bonito envoltorio de juego inocente y quizás infantil que aparenta a primera vista.
Pero la narrativa no solo está en su historia y en todo el simbolismo que podemos entrever en ella. El estudio polaco también se ha encargado que la jugabilidad del título forme parte activa en la narración de la historia. Tomaremos el control de la pareja protagonista, un niño y una niña, y tendremos que ir haciendo uso de las distintas habilidades de cada uno, por separado o en conjunto, para ir superando los distintos escenarios para avanzar en la historia. El niño es un pícaro buscavidas, un experto en ir a hurtadillas y amigo de lo ajeno. Por otro lado tendremos a la niña fuerte y rápida nos permitirá huir de las situaciones más peliagudas. La combinación de ambas nos dará momentos de sigilo, otros en los que tendremos que huir de los guardias y además también tendremos superar los puzzles que nos presentan. Esta colaboración nos hará participes de la amistad entre estos niños y echaremos en falta la presencia de alguno de ellos cuando estos estén separados. Aunque no todo es perfecto en este aspecto. Pequeños fallos en el control o algunos puzzles no demasiado bien explicados ensombrecen un buen planteamiento que adolece de falta de tiempo para pulir.
Otro de los aspectos en el que el My Memory of Us brilla con intensidad es en su acabado artístico. Todo está representado con un personalísimo look cartoon, como de dibujo al carboncillo, que le otorga al juego un carisma y belleza únicos. Pero que no os engañe su aspecto a cómic infantil, donde hasta lo que dicen los personajes se representa en bocadillos, el juego cuida al extremo su ambientación. Tenemos que poner en valor el diseño artístico del juego. Tanto los escenarios como los personajes están tratados con muchísimo amor y cuidado. Su acabado en escala de grises solo roto por el rojo de los ítems importantes, y de alguna cosa más que no queremos desvelar, aportan mucha fuerza a la narrativa visual del titulo. Y no quisiera terminar este apartado sin poner la lupa en el diseño no de la pareja protagonista si no sobre los robots invasores y su loca y maravillosa estética steampunk.
En la parte sonora solo os puedo decir que preparaos para una de las bandas sonoras más bonitas y mejor encajadas que he escuchado en mucho tiempo. Patryk Scelina da una clase magistral componiendo más de 40 temas para este juego. Temas que apoyan perfectamente lo que la historia quiere transmitirte en cada momento. Gracias a ellos sentiremos como nuestros la amistad, la perdida, la alegría, el miedo y el resto de emociones que sienten los protagonistas. Emotiva, bella, preciosa… es difícil elegir entre todos los adjetivos que me vienen a la mente cada vez que la oigo. Por último, y no por ello menos importante, tenemos la única voz que nos acompañara durante toda la historia: la voz de nuestro narrador. Patrick Stewart pone voz al dueño de la librería y narrador de la historia. Su profunda e imponente voz narrará las aventuras de nuestros protagonistas y tengo que admitir que es todo un acierto que el juego no llegue doblado al castellano ya que el trabajo de Stewart no tiene desperdicio y gracias a que viene subtitulado te enteradas de todo.
Estamos ante un trabajo soberbio al que pocas pegas se le pueden sacar. Una historia conmovedora que narra con tacto y sutileza una de las épocas más oscuras de la historia moderna. Un acabado artístico y de sonido magníficos que conforman una puesta en escena que ya quisieran para si algunos títulos triples A y conforman un juego que te llegará corazón y que se ha convertido por méritos propios en un indispensable en esta generación.
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