Preview Astral Ascent
6 mayo, 2022
Destinado a ser una de las sorpresas del año
Crear un videojuego no es tarea fácil y menos aún si eres un recién diplomado con mucha hambre para comerse el mundo pero sin un tenedor con el que pinchar siquiera un trozo. No es solo tener una idea, eso es lo “relativamente” fácil, hay que desarrollarla, darle un contexto, crear un flujo de trabajo, buscar financiación “como sea” o desarrollar un trabajo de marketing son algunas de cosas que se me vienen a la mente de entre un mar de tareas a realizar antes siquiera de poner la primera línea de código. Noticias como el reciente “Talents Gate”, un lugar que tenía que ser una incubadora de estudios y una burbuja única donde aprender a dar tus primeros pasos en una industria ultra competitiva que al final ha terminado reventando dejando al aire las vergüenzas más sonrojantes de una Sony que solo buscaba, según algunos de los estudios integrantes del proyecto, su propio beneficio. Es por eso, por tantas trabas que estos estudios indies se encuentran por el camino, que ver llegar juegos como Astral Ascent es algo a valorar y que denota el trabajo de estos auténticos titanes del desarrollo.
En Noespaisparafrikis hemos tenido la oportunidad de probar el early access del segundo juego de Hibernian Workshop para poder traeros unas primeras impresiones de un juego que esta convenciendo por todos los medios por los que esta pasando. Desde luego el estudio francés ya demostró su buen hacer con su primer juego y vuelve a la carga para demostrarnos que lo ocurrido con Dark Devotion no fue obra del azar si no que son un estudio dispuestos a demostrar que son capaces de hacer frente a cualquier desarrollo dejando su personalidad y su sello en el. Tanto es así que Astral Ascent se financió en Kickstarter en tan solo 3 horas y de los 30.000 eurazos que pedían ya llevan camino de superar los 150.000, si es que mientras lees esto no lo han hecho ya.
Y tal éxito en la campaña de financiación tiene fácil explicación. La primera de todas la podéis ver en el tráiler de más arriba. El apartado artístico de Astral Ascent es maravilloso. El estudio recurre de nuevo al pixel art y vuelve a crear personajes y entornos de fantasía repletos de detalles dando una dramática lección al resto de la escena del desarrollo, tanto indie como profesional, de como se tiene que usar el “pixel gordo“. Volvemos a ver animaciones fluidas que se usan para enlazar ataques de manera más que sobresaliente dando lugar a coreografías muy impactantes. Y si en Dark Devotion se optaba por lugares oscuros y tétricos en este juego se toma una decisión diametralmente opuesta apostando por unos entornos muy iluminados y coloridos en donde los efectos de luz toman el relevo a los juegos de sombras.
Otro gran punto a favor es su jugabilidad ya que en Hibernian apuestan en esta ocasión por desarrollar un “roquelite”. Un juego de plataformas 2D lleno de acción donde tendremos que ir recorriendo y limpiando de enemigos las 10 salas que nos separan del enfrentamiento con el jefe final de cada capitulo. El mejor, y más adecuado, adjetivo que podemos poner al uso de la acción en el titulo es desmedido. En cuanto entramos a la primera sala pocos serán los momentos en los que el juego nos dé un respiro. La pantalla estará constantemente llena de enemigos a los que derrotar y en las salas más compiladas donde los enemigos no dejan de disparar y moverse tendremos la sensación de estar jugando más a un “shoot em up” que a un juego de acción. Pero donde el juego realmente explota, como en casi todos los juegos del genero, son en los enfrentamientos con los boses finales de cada fase. 12 son los guardianes que guardarán las puertas del siguiente nivel y cada uno de ellos representa a una constelación de zodiacal. Su diseño es enorme, detallado, se roban las mejores frases de la historia con lo que se nota que, con perdón de los personajes principales, ellos son realmente los verdaderos protagonistas del juego. Sus animaciones son cuidadas, los patrones de ataque magníficos y cada uno cuenta con unas uña presentaciones que parecen sacadas de un buen shonen.
El control es preciso y nuestros personajes, habrá hasta 4 distintos, responden de manera ágil a las ordenes que le damos con el mando . Los combos se hacen de manera sencilla, combinando golpes normales con distintas habilidades que vamos encontrando y upgradeando por el camino. Un sistema que si bien ya hemos visto ya en muchos juegos sorprende gratamente por su, en un principio, sencillez. Y digo “en un principio” porque el único punto a mejorar del juego se encuentra en un sistema de habilidades que no termina de ser claro, o por lo menos eso me pareció a mi. En los primeros lances del juego no sabes muy bien como usarlas ni para que valen, te limitas a ir experimentando con cada una de ellas, eso en principio es parte de la diversión, pero el problema viene cuando desde el principio no sabes como se gestionan estas habilidades o magias lo que genera al final que en lugar de dedicarte a construir una build efectiva probando diferentes combinaciones en cada Run te dediques a usar las primeras que te salga y te medio vayan bien.
Un juego que me ha dejado un gran sabor de boca y que sin duda alguna si no pasa ninguna catástrofe Astral Ascent tiene todas las papeletas de convertirse en una de las sorpresas del año.
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