Análisis Kunai

Análisis Kunai

30 diciembre, 2020 0 Por Antonio Ganga
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El auge de la tecnología es innegable en las últimas décadas, y han sido varias las obras de ciencia ficción que nos han presentado un futuro distópico en el que la rebelión de las máquinas consigue hacerse con el control del planeta. El estudio TurtleBlaze y la distribuidora The Arcade Crew nos trae un juego ambientado en uno de esos futuros, en el que la humanidad ha sido sometida por las máquinas, y los ordenadores ostentan el poder. En este futuro post apocalíptico solo hay una heroína que puede salvarnos, una tablet robot ninja llamada Tabby, que se unirá a la Resistencia para acabar con el malvado Lemonkus. Su historia es bastante simple y predecible, pero en este tipo de juegos tampoco es un gran problema, ya que su punto fuerte es la jugabilidad.

Tabby irá armada con su fiel katana, que absorbe energía de los enemigos que derrotemos, sus shurikens paralizantes, y un par de ametralladoras de mano causar estragos entre las máquinas enemigas (de color rojo), perfectamente diferenciadas de las buenas (de color azul). Sus mecánicas entran en el género de los metroidvania, teniendo que visitar varias veces los escenarios para desbloquear diferentes caminos con las nuevas armas que vamos consiguiendo. Uno de sus principales atractivos es la verticalidad de los escenarios, gracias a las armas que dan nombre al juego, los kunais. Podemos usar estos cuchillos arrojadizos japoneses a modo de ganchos para trepar por las paredes y balancearnos por los techos del escenario como un Spider-Man tecnológico.

La progresión de nuestro personaje se realiza adquiriendo mejoras en unos routers que encontramos repartidos por el escenario en puntos muy concretos, normalmente en campamentos de la Resistencia. Como monedas para adquirir estas mejoras tendremos que utilizar unas piezas que obtendremos al derrotar a los enemigos, o en cofres ocultos por el escenario. En estos cofres ocultos también podemos encontrar piezas de corazón para mejorar nuestra vida, o todo un repertorio de sombreros coleccionables que mejorarán nuestra estética, sin mejoras jugables.

 

Su apartado artístico recuerda mucho al de las antiguas Game Boy, con una paleta de colores muy particular. Cada escenario tiene su color concreto, y las diferentes plataformas y enemigos se colorean con tonos de ese mismo color dando un aspecto casi monocromo, pero muy llamativo. Tabby también es puro carisma en su apartado visual, con toda una gama de emociones que se muestran en su pantalla de tableta, como poner cara de gatito al agacharse, de felicidad al balancearse con los kunais, o de furia al atacar a los enemigos con nuestra katana. Es imposible no cogerle cariño a los 5 minutos de estar jugando. Una gran ventaja de tener este estilo gráfico minimalista es que goza de un rendimiento perfecto tanto en modo dock como en portátil, lo cual es muy importante en un plataformas de este estilo, en el que un bajón de FPS podría hacernos fallar un salto o chocar contra un enemigo.

Su banda sonora también es digna de elogio, con un estilo mezcla de electrónica y chiptune que recuerda a la música de la generación de los 8 bits. Los efectos de sonido como explosiones, disparos o rayos también tienen ese estilo clásico de los años 90, que encajaría perfectamente en una Mega Drive o una Game Boy. El juego carece de voces, pero todo está traducido al castellano, tanto la interfaz como los diálogos.

En conclusión, un gran juego dentro del género de los metroidvania, con el atractivo de tener escenarios muy verticales, una jugabilidad a prueba de bombas, y una protagonista que derrocha carisma.

 

 

 

 

 

 

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Kunai

8.8

Historia

8.0/10

Jugabilidad

9.0/10

Diseño Artístico

9.0/10

Diseño de Sonido

9.0/10

A Favor

  • Tabby es puro carisma
  • Escenarios con mucho componente vertical
  • Apartado gráfico retro muy atractivo

En Contra

  • Historia simple y con poca profundidad