The Flash, mola que no es decir poco.

12 julio, 2016 0 Por furgonetero
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“Mi nombre es Barry Allen y soy el hombre mas rapido del mundo”

Vamos a dejar las cosas claras desde el principio, Flash MOLA.

 A partir de este momento si no te gustó la serie y esperabas encontrar un artículo escrito cuchillo entre dientes repleto de críticas feroces y repasando de manera sibilina todos los fallos que nos encontramos a lo largo de sus 23 capítulos mas vale que dejes de leer ahora mismo  y que hoy no pierdas mas tu tiempo porque  en esta reseña no vas a encontrar nada de eso.

Partiendo de esta base hay que remarcar que esta serie no aspira a ser el DAREDEVIL de CW, ni mucho menos, ni siquiera lo intenta. Y no lo hace por dos motivos, el primero porque el personaje en el que se basa no se presta a ello, Flash es un personaje más luminoso que el Demonio de Hells kitchen y su temática enmarcada en la ciencia ficción “chusca cincuentera”  que hereda, y arrastra con orgullo, tampoco es que dé para muchas tramas oscuras, ambientes lóbregos o héroes atormentados con sus dudas existenciales. El otro motivo es el más importante y es que CW no es NETFLIX o WARNER, aunque esta última ya podría aprender un poco de las otras dos, el target objetivo al que CW dirige la serie no es el friki medio occidental sino más bien la novia o compañera de ese friki medio occidental y con esto presente se entiende que un aspecto más serio de estos series es probable que atrajera a muchos fans pero es igual de cierto que espantaría a la mayoría.

Teniendo esto en mente la cadena americana ha desarrollado una serie que  ya en su primera temporada dejaba claro cuáles eran sus intenciones y ponía sobre la mesa todas cartas para no llevar a engaño al espectador y futuro seguidor de la serie. En esta temporada no hacen más que repetir el esquema que tan buenos frutos les dio el año pasado  y lo han multiplicado exponencial mente haciendo realidad el dicho del “querías sopa pues toma dos tazas” y hay que decir que, al menos este año, la jugada les ha salido bastante bien.

El esquema “monstruo de la semana” típico de una serie procedimental le viene muy bien a la serie y no llega a cansar en ningún momento y esto es decir mucho a su favor ya que estamos ante una temporadas de 23 capítulos, a todas luces demasiados, y que podía dar la sensación de estirar demasiado el chicle como le paso a la buena de Jessica Jones además durante todos los capítulos se mantiene latente el hilo argumental que une toda a todos los capítulos de la temporada  y que haciendo de Mcguffin (¿se dice así?) nos hace interesarnos por el siguiente capítulo de la serie a base de cliffhanger (ojo al del 2X15 que es un tuerce culos en toda regla) y que en esta temporada se centra en los universos paralelos (guay) y en Zoom otro velocista (¿otro?) que intentara deshacerse de nuestro héroe y dominar nuestro mundo (bueno y algo más).

Esta temporada también tiene, y por otra parte era de esperar, su dosis de novela teenager en todos los capítulos que pueden gustar más o menos pero que son santo y seña de la casa CW. Para mí es un punto a favor ya que  gracias a estos momentos es una serie que puedes ver junto a tu chica/mujer sin que salga espantada a la primera frikada de turno. Como contrapunto a esto los guionistas, bien asesorados,  pueblan los capítulos con mil referencias al comic o al universo DC que el más fan sabrá saborear (“Mi nombre es Barry Allen y soy el hombre más rápido de la tierra” si cambiamos el nombre de Barry por el de Wally así comienzan todos y cada uno de los comics de Wally West/Flash). Añadir que el propio Kevin Smith, el que no sepa quién es que por favor abandone esta página de inmediato, ha dirigido un capitulo y ya dice que en la próxima temporada dirigir unos cuantos más.

Pero como no puede ser de otro modo la serie algunos problemas, digo algunos siendo bastante benévolo. Quizá el más grande venga debido a su duración 23 capítulos que si bien hemos dicho antes que se llevan bastante bien y no se hacen pesados también es cierto que con tanto capitulo da tiempo para abrir muchos melones que luego cuestan trabajo en cerrar y se hacen de manera apresurada o mal hecha. Con tantos capítulos que rellenar la serie se puebla de nuevos personajes a los que presentar y que desarrollar y que en la mayoría de casos son personajes que no van a ningún lado para la trama de la serie y que son más bien el punto de entrada para las nuevas series que pronto nos llegaran (Legends of Tomorow).

A esto hay que sumar unos errores de casting que en el mejor de los casos diremos que son desafortunados, el caso de Wally West (así que ya sabemos algo para la próxima temporada), llegando a límites de la más pura nausea  como con el Hombre Halcón. En estos casos el actor lo hace tan mal o con tan poca solvencia que llega a lastrar tanto a su personajes (quitándole carisma) como al capítulo en el que aparecen.

Otro punto negativo de la serie, y esto es ya algo de carácter personal, es que se intenta martirizar en exceso al protagonista. Algo que ya pasaba en la primera temporada y que en esta lo han elevado a límites de “joder que mala suerte tiene el tío” y que no contaremos nada para no entrar en spoilers, pero que para nada van con el tono de la serie y lo único que desembocan es en intentar hacer de Barry Allen/Flash una especie de héroe atormentado que no va para nada con el personaje.

Hay otros fallitos por aquí y por allá pero que sin duda tenemos que perdonar para poder disfrutar de una serie que es un soplo de aire en esta avalancha de superhéroes que últimamente nos inunda tanto en televisión como en cines.

Como habréis notado no he comentado en exceso el argumento pues merece la pena que vayáis descubriendo capitulo a capitulo esta temporada y si no habéis visto la primera animaros a empezar con ella.