Kyurinaga’s Revenge, verduras guerreras.

12 enero, 2017 0 Por furgonetero
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Kyurinaga’s Revenge es un juego que representa la confianza en uno mismo, no lo digo por la trama del videojuego, sino por la historia de este juego. Reco Technology saco hace algún tiempo Yasai Ninja, un videojuego que mezclaba fases de plataformas en 2D con fases hack&slash en un mundo completamente 3D. Este juego se pego un batacazo debido, entre otras cosas, a errores en el planteamiento de la jugabilidad de las fases 3D.

Cualquier otra compañía viendo la trayectora desalentadora del juego habría dado carpetazo a la IP y se hubiera puesto a desarrollar otra nueva franquicia intentando cosechar a nuevos jugadores. Pero pasaba una cosa con Yasai Ninja y es que lo que hacía mal, lo hacía muy mal, pero lo que hacía bien, lo hacía muy bien. Y es que si en las fases 3D el juego dejaba mucho que desear, en las partes de plataformas  en 2D el juego ganaba muchos enteros, estas fases junto con el loco Japón feudal donde la especie dominante eran los vegetales y la historia de sus dos carismáticos personajes protagonistas han conseguido que los chicos de Reco se liaran la manta a la cabeza y trajeran esta segunda entrega de la saga, potenciando todo aquello en lo que Yasai Ninja destacaba.

La historia nos sitúa un par de años después del anterior juego donde la paz en este alternativo Japón está a punto de terminar pues el malvado Kyurinaga (enemigo de la primera entrega) vuelve con ganas de revancha y quiere restaurar de nuevo su Shogunato contando con la inefable ayuda del señor de las tinieblas Voldemaru. Nuestros protagonistas, el brócoli Broccolli Joe y la cebolla Kaoru Tamanegi, tendrán que volver a hacerle frente para derrotarlo de una vez por todas.

Toda la historia se nos va narrando mediante escenas animadas que recuerdan a antiguas pinturas japonesas. Aunque nos pueda parecer una historia muy vista y oída en multitud de obras del cine y la literatura la química existente entre los dos protagonistas y el carisma de estos consiguen que mantengamos la atención en todo momento. Los diálogos entre los personajes están cargados de humor y de ironía, llevando sobre sus hombros todo el peso de la historia.

El juego se encuadra en el genero de las plataformas 2D, en un mundo desarrollado al completo en 3D. Dar saltos, espadazos y dobles saltos será la tónica habitual al avanzar por los niveles. Además podremos cambiar en cualquier momento de personaje para usar sus habilidades especiales, lanzar kunais en el caso de Broccoli o poner explosivos Kaoru, y así resolver los distintos obstáculos que irán apareciendo en pantalla y lograr así seguir avanzando hasta el final de nivel.

El juego se puede, y se debe,  jugar de principio a fin de manera cooperativa offline manejando cada uno a un personaje. Es este aspecto lo que da el toque diferenciador al título y lo vuelve realmente entretenido, compartir la experiencia de juego con un amigo en el sofá y poder echarse unas risas mientras lo troleas con tu katana.

Entre pantallas de plataformas tenemos unos pequeños niveles de lucha en el que tendremos que defendernos de hordas de atacantes. Para ello el titulo se aleja del hack&slash para centrarse en algo mas perecido a juegos de baile tipo “Elite Beat Agents” o “Rhythm Paradise” ya que tendremos que ir eliminando enemigos enlazando golpes y combos pulsando los botones que nos indican en pantalla en el momento adecuado. Estos niveles son muy divertidos y una vez terminado el juego podremos elegirlos desde el menú principal.

En cuanto a la dificultad nos encontramos ante un juego de la vieja escuela, nuestros protagonistas mueren con un solo toque, “checkpoints” que se activan manualmente estan alejados entre sí y nos encontraremos ocasiones en que tendremos que medir nuestros saltos más que al milímetro “al pixel” para poder llegar a la plataforma deseada. Todos estos aspectos harán que repitamos una zona más ocasiones de las deseadas. Este tipo de jugabilidad puede espantar a los usuarios mas “casual” pero los jugadores más viejos del lugar o los que busquen un verdadero desafío encontraran en Kyurinaga una experiencia tan divertida como exigente.

Para poner este mundo en pantalla Reco vuelve a usar el motor Unity que se adapta de manera sorpréndete a cualquier tipo de juego. Los personajes están excelentemente retratados, tanto Joe como Kaoru gozan con un gran detalle y aunque sus animaciones son bastante básicas el acabado general de ambos es notable y el diseño artístico de todo el juego es espectacular. Lo mismo tenemos que decir de los decorados que se usan de fondo para nuestra aventura, coloristas paisajes del Japón que dan la sensación de estar dibujados a pinceladas irán desfilando por nuestra pantalla y que recuerdan en muchas ocasiones a las pinturas del periodo Edo. Por desgracia no podemos decir lo mismo del resto que vemos en pantalla, tanto enemigos como elementos del escenario no gozan del mismo nivel de detalle y acabado que nuestras verduras ninja  lastrando un poco el nivel gráfico del juego. Dicho esto tenemos que añadir que el juego se muestra estable durante todo el juego (versión PS4) ayudando a que la experiencia sea muy fluida. En conjunto ”Kyurinaga’s Revenge” es un juego con un acabado colorista y desenfadado que gustara a todos y goza de un gran diseño artístico digno de mención.

El apartado sonoro cumple sin más, melodías sencillas que no desentonan con el ambiente del juego y unos efectos de sonido cumplidores en la mayoría de los casos. Solo una “nota” negativa en este aspecto y es que entre canción y canción durante las fases se produce un silencio incomodo durante unos instantes muy alargados.

En conclusión os aconsejamos que no os eche para atrás su aspecto grafico o que parezca un sencillo plataformas ya que el equipo español ha creado un juego muy divertido y muy rejugable. Que recupera el modo cooperativo, tan abandonado en esta generación, y que representa un verdadero desafío en los niveles de dificultad más elevados. En definitiva una buena compra.